En tiempos de Jesús, los fariseos Le pidieron pruebas de que realmente era el Mesías, y ésta fue Su respuesta: “La generación mala y adúltera demanda señal; pero señal no le será dada, sino la señal del profeta Jonás. Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches” (Mateo 12:39-40).
Eso fue todo, Jesucristo sólo ofreció una señal: que, como Jonás (ve Jonás 1:17), Él permanecería en la tumba durante tres días y tres noches.
Desde entonces, la humanidad ha luchado con matemáticas de segundo grado, intentando apretar tres días y tres noches en un periodo de apenas 36 horas entre el viernes por la tarde y el domingo por la mañana.
No hubo testigos oculares de la resurrección de Cristo, y sólo existe un registro histórico: la Santa Biblia. La prueba de Jesucristo de que era el Mesías fue singular: no algún milagro espectacular que Él realizaría, ni pruebas que sólo los discípulos conocían, ni siquiera el hecho de Su resurrección. La única prueba era el tiempo que permanecería en el sepulcro.
Sobre este punto, no puede haber disputa, éstas son las palabras del propio Cristo. ¿Por qué, entonces, alguien creería que Él murió el Viernes Santo por la noche y resucitó el domingo por la mañana? ¿Revelan otras porciones de la Biblia exactamente cuándo murió y resucitó? ¿Y qué significa la verdad sobre la resurrección de Cristo para la observancia de la Pascua Florida [Easter, en inglés]?
Setenta y dos horas
1. ¿Sabía Cristo claramente cuántas horas había en un día? Juan 11:9-10.
No hay disputa real sobre el significado de las palabras de Cristo en Mateo 12 cuando dijo que estaría en la tumba tres días y tres noches. Juan 11:9-10 muestra que Él sabía cuánto duraba un día y cuánto duraba una noche: 12 horas cada uno. Los eruditos hebreos también están de acuerdo en que la expresión “tres días y tres noches” de Jonás 1:17 se refiere a un período de 72 horas.
2. Durante la semana de la creación, ¿cómo identificó Dios el día y la noche? Génesis 1:5, 13.
La Escritura deja claro que un día consta de dos periodos —la noche y la mañana— y que se identifican por la luz y la oscuridad. Así pues, la Biblia detalla cuánto durarían tres días y tres noches: tres periodos de luz y tres periodos de oscuridad.
Otras cuatro Escrituras confirman el periodo de tiempo que Cristo estuvo en la tumba: lee Marcos 8:31, Marcos 9:31, Mateo 27:63 y Juan 2:19-21. Todas confirman la duración. Si rechazamos esa prueba singular, rechazamos la señal que Cristo Mismo dio de que era el Mesías.
¿Cuándo murió Cristo?
Al darnos cuenta de que la creencia común no tiene conexión con el registro de las Escrituras, ¿podemos precisar qué día murió Cristo y qué día resucitó? ¡Por supuesto que sí!
1. ¿Fue muerto Cristo en un “día de preparación”? Lucas 23:46, 54.
Una de las razones por las que tantos creen que Cristo murió el viernes es en realidad bastante razonable. La Biblia dice explícitamente que el día de la crucifixión era llamado de “la preparación”. Esto significa que el día siguiente era un Sábado. Todo el mundo sabe que los judíos guardan el sábado como día de reposo (Sabbath), por lo que naturalmente —pero incorrectamente— suponen que este día de “preparación” fue un viernes.
2. ¿Era éste un día de preparación para el Sábado semanal o un Sábado anual? Juan 19:31.
El apóstol Juan aclara de qué tipo de Sábado se trataba. La expresión “de gran solemnidad” no denota el Sábado semanal, sino que se trataba de uno de los días santos anuales mencionados en Levítico 23, específicamente, el primer día de los Panes sin Levadura. Las Escrituras muestran que Jesucristo ya estaba muerto cuando llegaron los soldados con la intención de quebrarle las piernas (Juan 19:36).
3. ¿Por qué se aseguró Dios de que Cristo ya hubiera muerto antes de que llegaran los soldados para quebrarle las piernas? Salmos 34:20.
Debido a que el Antiguo Testamento profetizó que ninguno de los huesos de Cristo sería quebrado, Dios no podía permitir que los soldados llevaran a cabo sus planes. ¡Las profecías de Dios siempre se cumplen!
4. ¿Qué día murió Cristo? Mateo 26:1-2.
A lo largo de la historia bíblica, se mataba un cordero en la Pascua. Jesucristo también murió en la Pascua, que fue el día anterior, y por tanto el día de preparación, del primer día santo anual.
Estos días santos anuales pueden caer en cualquier día de la semana, no necesariamente en sábado. En 2020 y 2023, por ejemplo, la Pascua cayó en miércoles, igual que en el 31 d. C., el año de la muerte de Cristo (como muestra el calendario hebreo). El primer día santo anual fue el jueves. En lugar de morir el “Viernes Santo”, Cristo murió el miércoles, en la Pascua, tal como el pueblo judío había tipificado con el sacrificio de un cordero durante miles de años antes.
Entonces, ¿cuándo resucitó?
Sabiendo que se trataba exactamente de un periodo de 72 horas, debemos darnos cuenta inmediatamente de que la resurrección de Cristo tuvo lugar a la misma hora del día o de la noche en que fue sepultado.
5. ¿A qué hora del día murió Jesús? Mateo 27:46, 50.
El día de preparación terminaría al ponerse el sol (un día termina a la puesta de sol según la Biblia; ve Levítico 23:32), y la ley exigía que los muertos fueran sepultados antes del Sábado. Cristo “clamó a gran voz” cerca de “la hora novena” —expresión que se refiere a la novena hora después del amanecer— o alrededor de las tres de la tarde. Sabemos pues, por el registro de las Escrituras, que Cristo murió al final de la tarde del miércoles, fue sepultado antes de la puesta del sol y resucitó el Sábado (el día de reposo) a la misma hora. Ese es el cumplimiento de la única señal que dio Cristo: la señal del profeta Jonás.
6. ¿Quién confirmó que Cristo cumplió las Escrituras, específicamente la señal de Jonás? 1 Corintios 15:3-4.
Claramente, Pablo y los demás escritores del Nuevo Testamento coinciden en que Cristo resucitó al cabo de tres días enteros: 72 horas.
Escrituras mal entendidas
Algunas otras Escrituras relacionadas han sido comúnmente malinterpretadas y necesitamos entenderlas.
1. ¿Indica Marcos 16:9 que Cristo resucitó el “primer día de la semana”, o sea, el domingo? Marcos 16:9.
Fíjate bien: este versículo no dice que Él “resucitó” o “resucitó el primer día”. Dice que Él había resucitado. Ya habíasido resucitado, como muestran claramente las Escrituras, a última hora de la tarde del sábado.
Jesús había resucitado antes de que María llegara a Su tumba. Esa expresión del versículo 9 —había resucitado— es la única base para la idea de que Cristo resucitó el domingo por la mañana; sin embargo, ¡no dice nada de eso! En cambio, simplemente confirma que Cristo ya había resucitado y salido de la tumba cuando llegó María. Ella encontró que la piedra que cerraba la tumba de Cristo ya había sido removida (Marcos 16:4).
Así que tienes una elección: puedes creer en la tradición común, en el ministro de tu calle y en la mayoría de tus vecinos, o puedes creer en la única señal que dio Jesús, en el registro histórico que se encuentra en tu Biblia y en un cálculo matemático elemental.
En cuanto a la Pascua Florida y su tradicional “servicio al amanecer” dominical, no existe ninguna base bíblica para su observancia. La Enciclopedia Católica admite francamente que “los padres apostólicos no la mencionan” (artículo “Pascua Florida”).
Así es: la expresión Pascua Florida [Easter] ni siquiera se menciona en la Biblia. Aunque “Easter” se encuentra una vez en la traducción King James [en inglés], los eruditos están de acuerdo en que la palabra griega pascha en Hechos 12:4 debería traducirse como “Pascua” [o Passover, en inglés]. En su comentario, Adam Clarke dice sobre la palabra Easter: “Quizás nunca hubo una traducción más infeliz, por no decir absurda, que esa en nuestro texto”.
Los orígenes paganos de la Pascua Florida y cómo se arraigó en nuestra cultura son hechos de la historia, fáciles de descubrir. Para más información, solicita nuestra reimpresión del artículo “What’s So Sacred About Easter?”
[¿Qué tiene de sagrado la Pascua Florida?; disponible en inglés]. A continuación, para entender mejor los días santos de Dios (los mismos días que observó Jesucristo y que los verdaderos cristianos observan hoy) solicita el clásico folleto de Herbert W. Armstrong Las fiestas santas de Dios.